La alergia se define como una respuesta inapropiada o exagerada del sistema inmunológico frente a sustancias que el sistema inmunitario de algunas personas reconoce como nocivas y que en la mayoría de las personas no causan ninguna reacción (alérgenos).

La alergia tiene un alto componente hereditario. Esto significa que un niño cuyos padres son alérgicos tiene más probabilidades de desarrollar algún tipo de alergia durante su vida que un niño que no tenga esa historia familiar.

También juega un papel importante las toxinas alimentarias, aditivos y colorantes, las sustancias estimulantes toxicas, exo y endotoxinas microbianas y sutoxinas.

El 30% de la población mundial sufre algún tipo de alergias. Y los niños son unos de los más afectados, ya que de un 10% a un 15% de ellos son asmáticos y de un 20% a un 25% de los más pequeños sufren de rinitis. En tanto, la dermatitis en niños puede ser de 10% a 15% y persisten después de los 10 años.

Cualquier persona puede ser alérgica,  las alergias más comunes son las de las vías respiratorias, por ejemplo, la rinitis y el asma; en la piel, los eccemas y las dermatitis atópicas y en el intestino, la intolerancia a la leche y al huevo.

Las alergias pueden causar alguno de los siguientes problemas de salud:

• Anafilaxia: Si tienes alergias severas, estás en mayor riesgo de esta reacción inducida por alergia grave. La anafilaxia está asociada comúnmente con la alergia alimentaria, la alergia a la penicilina y la alergia al veneno de los insectos.
• Otra alergia: Tener un tipo de alergia también aumenta el riesgo de volverse alérgico a algo más.
• Asma: Si tienes una alergia, eres más propenso a tener asma, una reacción del sistema inmunológico que afecta las vías respiratorias y la respiración. En muchos casos , el asma se desencadena por la exposición a un alergeno en el medio ambiente ( el asma inducida por alergia ).
• Dermatitis atópica (eczema), sinusitis e infecciones de los oídos o los pulmones: El riesgo de contraer estas enfermedades es mayor si tienes fiebre del heno, una alergia a algún animal doméstico o una alergia al moho.
• Complicaciones micóticas de los senos nasales o los pulmones: se aumenta el riesgo de contraer estas enfermedades, conocidas como sinusitis micótica alérgica y aspergilosis broncopulmonar alérgica, si eres alérgico al moho.

HOMOTOXICOLOGIA

Afortunadamente existe la homotoxicología, que tiene sus bases en la inmunología y postula que las enfermedades son producidas por una acumulación de toxinas. Por lo que los medicamentos antihomotóxicos equilibran el sistema inmunológico provocando que el propio organismo active su sistema de rechazo frente a estas amenazas.

"Cuando una sustancia está homeopatizada  hace un efecto contrario al normal “ley de los contrarios”. Por ejemplo, la belladona es un tóxico que puede ocasionar convulsiones y fiebres, pero homeopatizada hace exactamente lo contrario, sirve para controlar la fiebre. Igual sucede con la cafeína, sustancia que pone a la gente hiperactiva, pero cuando está homeopatizada tranquiliza y seda".

Así, la homotoxicología se podría resolver y complementar de manera armónica  las terapias tradicionales, ya que permiten limitar el uso de los corticoides, antihistamínicos y antibióticos.

 Ademas de que la gran tolerabilidad oral evita el uso inyecciones y el trauma que esto genera en los infantes.

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